Bajo el lema «Sinergía en vez del ego: Juntos hacia la meta», tuvo lugar nuestro encuentro de la Juventud Idente a fines de octubre en la Casa St. Benno en Bad Lauterberg, Alemania. Cuatro días llenos de momentos inspiradores, actividades emocionantes y una comunidad que se sostuvo mutuamente, con más de treinta jóvenes de diferentes ciudades y países.
El apoyo mutuo fue para muchos una experiencia transformadora. Samuel, uno de los jóvenes profesores, lo describe así: «Todos en el grupo se apoyaron muchísimo. Constantemente se preguntaba cómo estaba el otro, qué hacía, y todos ayudaban.»
En la mesa y durante las caminatas surgían muchas conversaciones sinceras y profundas entre participantes de diversas edades. Todos tuvieron el valor de abrirse a personas desconocidas, algo que para muchos de los adolescentes resultó ser un gran desafío – con resultados sorprendentes.
Senderismo, juegos, momentos de reflexión y talleres: todo contribuyó a fortalecer el sentido de grupo. Descubrimos cosas nuevas, como soldar y bailar. Pheline cuenta cómo el grupo la animó: «En realidad, no quería bailar, pero los demás estaban tan contentos de que lo hiciera, que participé. Al final, también me divertí porque ellos estaban felices.»
El encuentro concluyó la última noche con un momento de silencio alrededor del fuego. Mientras se escuchaba el crepitar de las llamas, reflexionamos con gratitud sobre la comunidad que se había formado en tan poco tiempo.
Nos llevamos un mensaje:
«LLevad este sentido de comunidad al mundo. Preguntaos: ¿Dónde está el otro? Y poneos en camino juntos.»