La Navidad en la parroquia de San Agustín, en Palma de Mallorca (España), administrada por los misioneros identes, ha estado marcada por la belleza artística y por la labor misionera con los vecinos de la zona. Los actos de la Navidad se iniciaron con un Ateneo a cargo de los niños y niñas de catequesis de Primera Comunión. Preparamos un teatro y unos villancicos para los papás y familiares y ellos nos regalaban una merienda. Fue muy bonito y un acto muy trabajado y entrañable.
En la Misa del Gallo, aquí llamada “Missa de Matines”, cantó una joven el «cant de la Sibil·la», un canto ancestral del siglo XI muy tradicional en la Iglesia mallorquina, y un niño el Sermón de la Calenda, que viene a ser una especie de pregón del Nacimiento del Niño Dios. Junto con un Belén viviente a cargo de los niños y niñas de catequesis, la feligresía recibimos la llegada de la Navidad.
Para impregnarnos de este ambiente tan especial, realizamos una actividad misional por el barrio felicitando la Navidad e informando de las Misas y actividades parroquiales.
Los venerables y Santos Reyes Magos desde las lejanas tierras de Oriente se hicieron presentes en la parroquia el mismo 6 de enero, Día de la Epifanía, con un mensaje de paz y alegría para todos los presentes y muy especialmente a los numerosos niños, que con miradas de inocencia y asombro, acogían a los Reyes y disfrutaban de los regalos que éstos les traían.
Previo a la entrega de regalos, los jóvenes de Juventud Idente representaron un teatro enmarcado en nuestra realidad actual de la migración y el espítitu navideño de acogida y fraternidad.
Posteriormente nuestro amigo Pablo junto a nuestro hermano Francisco Gallo, párroco de San Agustín, nos deleitaron con unos villancicos y la joven Marta nos ofreció dos canciones con lo que animaron el acto que finalizó con un piscolabis de encuentro y fraternidad.
La actividad misional dio su fruto y pudimos contar con la participación de comercios, entidades y familias para poder llevar a cabo este hermoso acto de bienvenida.