Del viernes 28 al domingo 30 de septiembre de 2018 se ha realizado en la Ciudad monástica de San Miguelito el Motus Christi para jóvenes de nuestra parroquia San Francisco Javier que se preparan para recibir la confirmación en el mes de diciembre de este año. Se ha contado con más de 100 jóvenes, chicos y chicas de las 5 comunidades más grandes, que con mucho entusiasmo y alegría han participado en todas las actividades previstas que tenían como objetivo fortalecer la fe de los jóvenes y prepararles espiritualmente para que puedan entrar a nivel personal en una relación más profunda con Cristo y vivir y transmitir los ideales evangélicos.
La tarde del sábado 29 se ha vivido ya con el ambiente festivo de la gran celebración de los santos Arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael; en nuestra hermosa iglesia dedicada al Padre Celestial se ha celebrado la solemne eucaristía presidida por el obispo titular, Mons. Robert Flock con la asistencia de los parroquianos de diferentes comunidades aledañas, jóvenes identes y amigos de San Ignacio de Velasco. Después de la procesión con San Miguel Arcángel se ha ofrecido a los jóvenes, líderes religiosos (han participado en el retiro 12 de diferentes comunidades de nuestra parroquia desde el jueves 27) y “posocas” (visitantes) la rica patasca (sopa de maíz con carne de res) y chicha (bebida tradicional de maíz molido) hechas en San Miguelito con mucho cariño por el personal y los misioneros.
El ateneo nocturno, celebrado en el atrio de la iglesia, en medio de la naturaleza ha sido la culminación de este día, donde los jóvenes presentaron números artísticos del folclore local y varias obras de teatro preparadas en sus propias comunidades (aldeas). Nuestras voluntarias eslovacas, Lenka y Romana, que trabajan en el colegio de la comunidad de San Juancito han tenido un gran éxito con su propia canción “Caminando a San Juancito”, invitando a todos a ser + en la generosidad y en el compartir.
Aunque la organización de este mega – evento no ha sido fácil, dada la complejidad del transporte entre las comunidades y San Miguelito y otros factores que requieren mucho esfuerzo organizativo, hemos visto como la fuerza de la gracia ayuda a superar todos los obstáculos cuando se trabaja en común el ideal que soñamos para todos: para que sean y seamos santos como nuestro Padre Celestial es santo.
