Llenos de sed de una vida más profunda, 60 jóvenes adultos vinieron al Motus Christi desde Long Island, desde el Bronx, y desde otras ciudades. Se reunieron en el Centro de Formación de Fe de la Parroquia de Santo Domingo en el Bronx, el pasado 19 de febrero para reflexionar, orar y compartir durante este tiempo de Cuaresma.
El p. Fernando Real, superior general de los misioneros Identes, les habló a los jóvenes sobre la relación personal con Cristo a la que estamos llamados, y sobre algunas actitudes que nos alejan de Él: orgullo, ira, conflicto, comodidad, lujuria, pereza, irresponsabilidad. Nos exhortó a vivir la oración diaria, la lectura del Evangelio, la Eucaristía y la dirección espiritual. Por su parte, Rose Calabretta, misionera idente, nos habló de algunas cosas que pueden causar desequilibrio en nuestra alma y en nuestro espíritu, y de cómo ser libres, eligiendo el bien supremo, que es, en definitiva, la voluntad de nuestro Padre Celestial.
Todos quedaron conmovidos por los ponentes y sus charlas. Al final del Motus Christi, los participantes compartieron sus impresiones en algunos grupos, divididos por idioma. Entre sus impresiones destacaron el compromiso de vivir una vida de oración más profunda, la necesidad de ayudar a sus compañeros en la fe, y la confianza en la ayuda del Espíritu Santo.
Pero no terminó ahí. Muchos de los jóvenes se apuntaron a seguir reuniéndose mensualmente para continuar formándose en la vida espiritual, creciendo más profundamente en Cristo y compartiendo su amor.